Aroa. Aroa es una niña tan sumamente importante para mí y a la que quiero tantísimo, que se me quedarían cortos todos los adjetivos buenos de los diccionarios de todos los idiomas. Aun así me faltarían palabras porque Aroa no enamora solo con su cuerpo y su mirada, sino también con su corazón. Es muy difícil, imposible diría yo, colarse dentro de él, pero una vez que lo logras te das cuenta de que no quieres abandonarlo nunca.

Aroa es sencillamente lo mejor de lo poquísimo bueno que me he encontrado en una paginilla de modelos y fotógrafos llamada Fotoplatino. Ella me llamó la atención desde el primer día que la vi con unas fotos fantásticas, la gran mayoría de mi gran amigo Luisma de Guiño Estudio. Una fantasía  morena, de cuerpo perfecto, cara de muñeca y la mirada más dulce y penetrante que he visto. Y por si todo eso fuera poco: con el tatuaje más bonito que he visto.

Curiosamente y aún alucinando con cada una de sus obras de artes, Aroa es la única niña que me ha impresionado tanto que evité  proponerle hacer algo juntos. Sus fotos eran de tanta calidad, con fotógrafos tan sumamente buenos, que se me hacía un poco pretencioso querer colarme en su hall of fame. Y así fue, estuvimos en contacto durante muchísimos meses a base de mensajes, comentarios y forjando lo que  se convertiría en una bellísima amistad. Pero de proponerle hacer fotos, nada de nada.

Con mi buena suerte habitual, y con el paso del tiempo, mi queridísima Aroa, se semi-retiró del panorama fotográfico, por lo menos para la gran mayoría de los fotógrafos, quedándose únicamente con mi queridísimo Luisma. Muy buena elección, por cierto.

La amistad con Luisma creció, también con Aroa y cierto día Luisma y yo pensamos que deberíamos unir fuerzas para hacer algo con Aroa. Pero no para hacer algo bueno, sino algo espectacular…  que no dejase indiferente a nadie.

Buscando ideas e inspirándonos en unas fotos que había hecho Rankin, pensamos que no estaría nada mal pringar el deseable cuerpo de Aroa con algo tan delicioso como chocolate líquido. Estuvimos pensando en la logística de cómo hacerlo sin dejar el estudio hecho un cuadro, y entre grifos, plásticos y material de los chinos llegamos a la conclusión de que el estudio no tendría que sufrir nuestras maldades chocolácticas.

Le propusimos la idea, pensó que estábamos locos, pero que le encantó. Y así, un fin de semana de Agosto (y con coche alquilado y todo, el mío se había muerto con Blanca…) me fui directo a Oviedo para llevar a cabo la maldad.

El regalazo de una sesión con Aroa, había que aprovecharlo al máximo, y aunque  ya me había advertido que a las 2 ó 3 horas se suele cansar y poner cara de “mato todo!”, estuvimos en el estudio unas 5 ó 6, disparando sin parar, llevando a cabo un montón de ideas chulísimas y finalizando el show con el baño de  la muñequita asturiana en chocolate.

Anécdotas. Ja ja ja… pues lo que nadie sabe, y en lo que nadie piensa al ver las fotos, es en lo FRIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIO que estaba el chocolate!!!! No os podéis imaginar lo que gozaba yo haciendo la maldad al ver como Aroa se encogía, chillaba y se acordaba de miembros de mi familia mientras le echaba el chocolate por encima. Pero no siempre soy malo eh:  también hubo momentos tiernos como el del abrazo del oso entre “Álex limpio y Aroa Pringosa”.

Sin duda,  lo que fue digno de ver fue el despliegue “tecnológico” que tuvimos que hacer Lusima y yo para duchar a Aroa en el medio del estudio sin manchar nada, a base de manguera y agua FRIIIIIIIIIIIIIIA!!!! Ja, ja, ja… somos lo peor, como nos pasamos. Creo recordar que a Aroa aun le olía el pelo a chocolate 3 semanas después… vamos, más que nunca, para comérsela!!!

Pero las curiosidades no mueren ahí. Algo que teníamos más que claro era que esas fotos iban a llamar la atención… y así fue. A la semana ya vimos el primer intento de copia, y digo INTENTO, porque aunque Aroa estaba súper indignada, a Luisma y a mí nos daba la risa. Si vas a copiar / inspirarte / recrear algo, por favor, intenta hacerlo mejor o por lo menos igual de bien. Semanas después aparecieron más fotos que según su protagonista “habían sido hechas hacía dos años”. Qué casualidades tiene la vida… no?

En el fondo no dejaba de ser gracioso. Gente que intentaba “ tu foto… como si la fotografía de una competición se tratase. Yo lo único que quise con esta foto, fue darle a Aroa algo que le gustase  y que al mirarla se riese recordando lo bien que lo pasamos ese día… esa es mi auténtica competición, conmigo mismo.

Antes de cerrar el post de hoy, toca hablar del procesado. Como podéis ver: mínimo, prácticamente inexistente. Limpiar el fondo y contrastar un poco la imagen… Aroa NO necesita más, es suficientemente perfecta como para tener que depender del retoque. Yo diría que las dos fotos que hay de ella en la exposición no tienen más de 2 minutos de photoshop cada una.

Desde DEADLYWOOD y desde lo más profundo de mi corazón le doy las gracias a este encanto que tan afortunado he sido de encontrarme. Mi morenita linda, mi sueño fotográfico y mi super amiga… Un besazo enorme guajinosidad!!! Eres y serás la number 1!

Besines.

(Ahhhh..y otra anécdota: es la FAVORITA de mi madre, ja ja ja!!!)